Poemas: Flor María Rigoni

“Tenemos la libertad de emigrar, no la libertad de hacer migrar”, son palabras de Giovanni Battista Scalabrini (1839–1905), llamado el ‘hombre puente’ y fundador de la Congregación de los Misioneros de San Carlos, mejor conocidos como encalabrínanos, cuyo carisma desde su fundación desde 1887 es la atención a los migrantes. A la fecha la Congregación se encuentra presente un treinta países, entre ellos México (Tijuana -La Casa del Migrante – Nuevo Laredo y Tapachula), donde unos trece misioneros procuran crear conciencia sobre la realidad de la movilidad humana como una que va más allá del simple aspecto económico, pues, como diría Víctor Hugo, “el exilio es la desnudez del derecho”. Una versión actual de los exiliados son los migrantes. El padre Flor María Rigoni conduce la Casa del Migrante ‘Albergue Belén’ en Tapachula, Chiapa; en sus palabras, la esperanza radica en que “América Latina se entiende sólo desde sus futuro.”  Por su labor incansable fue nombrado el año pasado Premio Nacional de Derechos Humanos. 

http://biblioteca.itam.mx/estudios/60-89/82/FlorMariaRigoniNuestrashoaholvidada.pdf

Autor: 
Flor María Rigoni
Número de revista: 
82
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